
Este ya es el disco nº 25 de su carrera, con un sonido continuista a Magic, más pop pero que suena también a un poco de todo y con matices a las diferentes etapas en la carrera de Bruce: rock, blues, country, folk. Lo que sí se echa en falta es que para ser un disco con la E Street Band no se notan casi la presencia de la guitarra eléctrica (Steve van Zandt) ni del saxo del Clarence Clemmons. Pero lo más sorprendente es que el álbum lo abre una canción de 8 minutos clavados, Outlaw Pete. Aquí os dejo con el vídeo de otra, My lucky day: