Hoy vamos a analizar algunos de los más comunes seres voladores que pululan los cielos de Barcelona, que pueden ser los mismos entes que ocupan otras ciudades del mundo. Las primeras y más comunes son las palomas o ratas voladoras. Se ve que fue un policía el que las introdujo en la ciudad después de que le gustase verlas en Londres. A este tío habría que levantarle un anti-monumento, una estatua hecha adrede para que las palomas se posen en ella y se caguen. No sé que le vería de bonito a este bicho infecto, portador de infinidad de enfermedades. Una buena limpieza no vendría mal y da igual lo que diga Greenpeace ya que medidas drásticas, tiempos felices.
Siendo Barcelona una ciudad costera, no podían faltar las gaviotas. Se las oye venir de lejos con ese graznido tan peculiar que pegan. Cuidado con su defecación, ya que es altamente corrosiva y de un tamaño considerable, normal teniendo en cuenta que estos bichos pueden llegar a medir de ala a ala 76 centímetros. Cagan tal cual fuesen bombarderos de la 2ª Guerra Mundial, apuntando a discreción.
Los terceros en discordia y que siempre he visto por las calles acompañando a las palomas son los gorriones, que no hacen otra cosa que comerse las sobras que van dejando sus amigas. Es la más pequeñita de las aves que se pueden ver por aquí y la más limpia. Avanzan dando saltitos muy graciosos. Después en menor medida se ven últimamente por la ciudad urracas, que emiten un ruido similar al del cuervo. También hay loros verdes cabezones que echan a otras especies y destruyen todo lo que encuentran. Son simpáticos pero están fuera de su hábitat. Se dice que su origen puede provenir de que se escapasen hace 20 años del Zoo o como resultado de la irresponsabilidad de la gente al soltar sus mascotas una vez se cansan de ellas. Un animal que se ha introducido para acabar con muchos de estos anteriores es el halcón, aunque aún no he tenido la suerte de ver ninguno en acción. El canalla se ve que campa a sus anchas el cielo y acaba cargándose antes los pobres pájaros domésticos que hay encerrados en jaulas en los balcones que a las palomas y demás seres inmundos. Por último también te puedes encontrar algún periquito fugado o alguna golondrina perdida proveniente del campo.
jueves, 18 de diciembre de 2008
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2 comentarios:
jajajaja...ten cuidadooooooooooooooooooooo con las gaviotas....SON LOS PAJAROS DEL TIO ALFRED........
son muy chugas las muy putas....y no paran de tocar lo guevos y ya pasan de los humanos y acapan por donde kieran ellas...se lo comen todo las muy warras...
alguna vez inclusive e llegado a ver un combate con palamos y se las devoran
Por aquí en Zaragoza también hay plaga de estos pajarracos.
Aunque a mí me hacen gracia y todo.
Un saludo!
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