En cuanto al resto, poca cosa. Es una ciudad baldía en cuanto a reclamos turísticos (solo tiene una tienda de souvenirs), ya que es más un lugar de negocios lleno de oficinas y tipos en traje andando por las calles. Y poco que ver, tan poco que ni llego a poner 10 fotos como he puesto de los demás sitios, ya me ha costado juntar estas incluso metiendo fotos de paisajes desde el tren y rellenos varios.
De las cosas más salvables para ver están la Iglesia de San Pedro, la más antigua de Zúrich y que tiene el reloj más grande de Europa, un auténtico cachivache para cegatos con números enormes; la Church of Our Lady, otra con un reloj que tampoco se queda corto; la Fuente de Lindenhof, la cual no vale nada sino que tiene más valor histórico que otra cosa, ya que conmemora el día en que las mujeres de Zúrich salvaron a la ciudad del poder de los Habsburgo.
Y hasta aquí el viaje. Ahora tengo varios próximos proyectos en mente, pero nada reservado todavía, así que ya os mantendré informados de cual será el siguiente destino de la lista.
Mega hit photo compilation sobradas vol.XXIII:
1 comentario:
Coñe... como me recuerda a la Eurocopa. Allí parecerías un rezagado de las celebraciones. jejeje
Estaremos atentos a esos futuros proyectos...
Un saludo.
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